Siento culpa al no poder cuidar a mi padre mayor.

Hola Amiga S.O.S,

¡Necesito tu opinión! Estoy enfrentando un dilema familiar que me preocupa. Mi padre, de la tercera edad ha tenido problemas de salud recientes, así que pronto ya no podrá vivir solo como lo ha hecho hasta ahora.

Aunque afortunadamente mantiene muy bien su lucidez mental, se puede movilizarse por sí mismo y recibe ayuda semanal para las tareas del hogar, su salud está en declive. 

Soy su única hija residiendo en la misma ciudad que él, mientras que mis dos hermanos viven en otro estado del país.

Ellos están pendientes de nuestro padre a distancia y le contribuyen económicamente, para complementar sus ingresos de retiro. 

A mi padre le agrada su independencia, pero sus recurrentes crisis de salud indican que pronto necesitará mayores cuidados.

Sé que, en último caso, él preferiría quedarse conmigo pero yo vivo con mi esposo e hijo, sin el espacio ni las comodidades para acogerlo en mi casa. 

He considerado la posibilidad de alojarlo en un hogar de ancianos, pero mi padre está renuente por no querer convivir con extraños.

Uno de mis hermanos tampoco está de acuerdo con esa opción, por los casos de maltrato y negligencia que se dan con frecuencia en muchos de estos centros.

Incluso, una buena amiga que cuida a su madre anciana, me dijo que, “cómo se me ocurría ingresar a mi padre en un lugar así“. Todo eso me hace sentir culpable, muy culpable.

Amo a mi padre, y quiero cumplir mis responsabilidades como hija; algo que él, sin duda, se merece.

Sin embargo, por otro lado, también necesito equilibrar y asumir mis propias responsabilidades respecto a mi vida personal, mi trabajo y mi propia familia.

Siento culpa por no poderlo hacer… estoy estresada, confundida y no sé qué hacer.

¿Cómo puedo encontrar una solución que beneficie a todos, especialmente a mi padre? No sé como manejar la culpa al no poder cuidarlo.

Agradecería la perspectiva de una amiga que no me juzgue para ayudarme a aclarar mis pensamientos. 

*Hija desorientada*

🔺🔻🔺🔻

Hola mi amiga desorientada, entiendo la complejidad de crear un balance entre el cuidado y apoyo a nuestros padres en la vejez, y nuestras propias responsabilidades y limitaciones de tiempo, espacio o recursos. 

Lo primero que debo decir es que no te permitas sentir culpa por nada, mucho menos si esa culpa es transmitida por otras personas.

La situación y tu situación es la que es. Comentarios de crítica como el que hizo tu amiga —no importa lo “buena“ que ella sea— no te aportan. No los aceptes. 🚫

La contribución económica de tus hermanos a tu padre es importante pero su participación activa, aunque sea a distancia, es esencial. No basta con enviar dinero y discrepar con las decisiones.

Ellos deben involucrarse en la búsqueda conjunta de soluciones viables para tu padre pero siempre respetando tu tiempo y disponibilidad presencial, ya que ellos no pueden aportar eso a distancia.

Ya que tú tienes un rol mayor en el proceso por tu cercanía física, orienta a tu padre en sus opciones de cuidado.

Su lucidez es una ventaja, así que permítele ser un actor principal (¡porque lo es!) en las decisiones informadas que le competen y que mejor se ajustarán a sus necesidades y preferencias, conforme sus condiciones de salud se vayan modificando.

Mis sugerencias:

• Entendiendo que él preferiría vivir contigo a tener que hacerlo con extraños en una residencia para adultos mayores, explícale que tu casa no tiene las condiciones ni el espacio para su comodidad.
  
  Hazle ver las ventajas de otras alternativas, donde podría tener mayor confort y cuidado especializado cuando ya no pueda vivir totalmente solo.

• Analiza las diferentes opciones de atención y vivienda para tu padre, incluyendo asistencia permanente en su domicilio, centros de día o residencias geriátricas de calidad, las cuales ofrecen apoyo con independencia.
  
  Compara los costos, servicios, instalaciones y las reseñas de otros usuarios como base de información.

• Consulta únicamente con personas que hayan tenido experiencias similares con sus padres, para explorar otros recursos y “atajos“ que solo conocen quienes han tenido esta vivencia.
  
  Aquellos que pueden y tienen a sus padres mayores viviendo en su casa, NO son tu fuente de guía.

• No entres en ansiedad anticipada. Ve un paso a la vez. Ahora toca informarse bien de diferentes fuentes confiables y de otras personas que hayan pasado por lo mismo.
  
  Ya llegará el momento de decidir informadamente, pero no te cargues con una antelación innecesaria.

Mi amiga desorientada, me preguntas en tu mensaje, ¿cómo puedo encontrar una solución que beneficie a todos, especialmente a mi padre? No, no puedes.

No te corresponde “buscar el beneficio de todos“. Solo haz lo mejor posible para él, sin olvidarte de ti ni descuidar a tu familia. 

¡FUERA CULPA!.. Perdón por gritar 🙂

“Cada decisión que tomemos como cuidadores de nuestros padres no será perfecta. Habrá obstáculos; en otros momentos, también todo irá sobre ruedas.

Absorbe lo que necesitas y luego ponte al volante con tu ser querido a bordo. Disfruta el viaje tanto como sea posible pero cuídate principalmente.“

Kuba, Cheryl. Navigating the Journey of Aging Parents.
[Navegando el viaje de los padres mayores]

¿Seguimos conversando? Gracias por tu confianza. 💗

🔴 DEL KIT S.O.S:
Libros como ¡Ahora soy papá de mis papás! (Fernando Roca, 2021), podrían guiarte durante este proceso.